El amor y la amistad son dos tesoros de la vida que suman momentos de ilusión, confianza en uno mismo, felicidad, autoestima y vitalidad. En breve, se celebran las fiestas de Navidad, una época del año en la que las reuniones familiares y las celebraciones de amigos adquieren un protagonismo especial. Sin embargo, el amor y la amistad son dos sentimientos que tienen un valor atemporal que conviene cultivar a lo largo de todo el año:
1. En primer lugar, establece un orden de prioridades en tu vida para dedicar más tiempo a esos amigos con los que de verdad te apetece estar. El tiempo es un recurso limitado y es un gesto de inteligencia emocional emplearlo de acuerdo a los propios intereses. En la etapa de la adolescencia, se otorga un gran peso al valor del grupo y a la integración en el mismo. Sin embargo, conforme maduras, también ganas experiencia personal, confianza en ti mismo y vitalidad. Cultiva tu autoestima compartiendo tiempo con tus amigos, esos amigos de corazón.