Las amistades superficiales y las relaciones profundas son diferentes. Cada tipo de vínculo es positivo en sí mismo, especialmente, cuando existe un equilibrio. Es decir, si una persona echa de menos la compañía de lazos verdaderamente significativos, siente el vacío de la soledad. Sin embargo, las relaciones profundas no pueden ser infinitas puesto que requieren de un alto grado de implicación, compromiso y dedicación (y el tiempo es limitado).
En el blog de mobifriends compartimos 6 diferencias entre las amistades superficiales y las relaciones profundas.
1. Diferente nivel de confianza
Un lazo superficial puede llegar a evolucionar hasta consolidarse en una amistad verdadera. Pero eso es algo que no siempre sucede, es decir, no existe una relación de causa y efecto que determine la dirección hacia la que se orienta un vínculo. Los temas de conversación están en sintonía con el nivel de confianza que existe entre dos personas. Dos verdaderos amigos comparten confidencias y también disfrutan de otros comentarios menos trascendentales. Sin embargo, en los vínculos superficiales hay poco espacio para los secretos.
2. Surgen diferentes emociones ante un silencio compartido
La ausencia de palabras puede llegar a generar un alto nivel de incomodidad en una relación superficial. Es decir, los amigos experimentan tensión interna cuando la conversación se estanca o el diálogo no fluye entre ambos. En ese tipo de circunstancia es habitual que uno o ambos intenten ocupar el tiempo con temas recurrentes. ¿Qué ocurre en una relación profunda en la que existe confianza? En ese caso, los amigos se sienten cómodos incluso cuando se producen instantes de silencio que cada uno vive desde su propia perspectiva.
3. El vínculo se sustenta en una base diferente
Todo vínculo tiene una base. Sin embargo, los cimientos de una relación superficial son muy frágiles. El lazo no tiene unas raíces fuertes y sólidas. De hecho, es habitual que los amigos coincidan de forma frecuente en algún lugar porque las circunstancias externas propician esos encuentros casuales. En una relación profunda, por el contrario, existe un propósito claro. El vínculo evoluciona porque ambos tienen el compromiso firme de compartir un proyecto en común. Como hemos comentado, puede ocurrir que un lazo superficial se consolide en la forma de una amistad verdadera. Pero no ocurre en todos los casos. Es probable que ese lazo llegue a romperse por completo o permanezca en el mismo punto durante mucho tiempo.
4. Las relaciones profundas tienen una dirección, la amistad superficial carece de ella
Un vínculo profundo no ha llegado a consolidarse como una historia importante de forma casual. Es decir, existe una dirección a corto, medio y largo plazo. Existe una reciprocidad, un equilibrio y un deseo común de seguir compartiendo momentos inolvidables. ¿Qué ocurre en una relación superficial? Destaca la ausencia de una meta perfectamente definida.
5. Acompañan, pero de distinto modo
Las relaciones superficiales y profundas no son incompatibles, de hecho, son perfectamente complementarias. Es decir, no solo la amistad verdadera es significativa. Existen vínculos superficiales que pueden aportar momentos de diversión, alegría, inspiración y bienestar. Sin embargo, la compañía que aporta cada tipo de amigo es diferente. Generalmente, los mejores amigos son aquellos con los que te sientes como en casa incluso cuando te encuentras en un momento complejo. En esos instantes en los que tal vez no estés disponible para todo el mundo, es probable que te sientas más cómodo mientras sientes la compañía sincera de personas que te conocen de verdad.
Las frases de amor y amistad sinceras y verdaderas se enmarcan en el contexto de una relación consolidada. En un vínculo superficial, por el contrario, hay poco espacio para las promesas.
6. Presentan distinto nivel de resiliencia
Una relación superficial puede romperse con la máxima facilidad. Con frecuencia, suelen ser vínculos que están muy condicionados por las circunstancias externas. Cuando los factores del entorno propician el encuentro, el contacto se mantiene. Sin embargo, cuando ocurre algo que rompe con el escenario previo, el lazo se debilita hasta romperse. Las amistades profundas, por el contrario, pueden sobrevivir incluso a la distancia. En ocasiones, se fortalecen en la adversidad.
Estas 6 diferencias entre las amistades superficiales y las relaciones profundas pueden ayudarte a reflexionar en torno al valor de los vínculos afectivos en todas sus formas y matices. Un lazo poco sólido puede llegar a transformarse en una historia muy importante. Pero también ocurre al revés. En ocasiones, la amistad sincera se debilita con el paso del tiempo como consecuencia de la falta de cuidado. No solo es importante identificar un tipo de vínculo para no depositar expectativas equivocadas en él. También puedes reflexionar sobre qué lugar quieres que llegue a ocupar una persona en tu vida. Aunque es algo que no depende solo de tu voluntad, sí puedes actuar de forma consciente de acuerdo a tus expectativas. Por ejemplo, si quieres que un vínculo superficial evolucione, intenta poner de tu parte para que eso pase.