Ninguna ruptura es sencilla porque implica un cambio importante en la vida del protagonista. Ese cambio es positivo en sí mismo, sin embargo, no siempre es fácil vivirlo de este modo. La incertidumbre puede irrumpir con fuerza en el corazón de quien se aleja de su zona de confort previa. Existen rupturas no deseadas para una de las partes.
Así ocurre cuando alguien tiene que aceptar la decisión del otro, a pesar del propio amor que anhela un mayor compromiso. Que una ruptura sentimental sea no deseada, no significa que no pueda superarse. De este hecho, es posible transformar esta dificultad en una oportunidad.
1. Aquello que siente el otro, a ti también te afecta
Cuando te centras en aquello que sientes tú, vives la frustración de una historia que llega a su fin incluso cuando hubieses deseado una alternativa distinta. Pero tan importante como aquello que tú vives en tu mundo interno es lo que percibe quien fue tu pareja hasta hace poco tiempo. Mereces ser correspondido y recibir lo mismo que tú ofreces.
2. No adoptes el rol de víctima
En ocasiones, el sufrimiento causado por una ruptura sentimental procede más de la propia actitud ante los hechos, que de la situación en sí misma. Así ocurre cuando el enamorado llega a dramatizar lo ocurrido y deja de actuar como protagonista de su propia vida.
Esta historia sentimental ha ocupado un lugar relevante en tu biografía. Esa relación ha terminado, pero otros muchos proyectos apasionantes continúan. Pon el foco en aquello que te ilusiona, en lugar de en aquello que te la quita.
¿Cómo superar una ruptura de pareja de muchos años de duración? Evitando el rol de víctima.
3. Practica la aceptación en la ruptura sentimental
Aunque un deseo no realizado duele más en este contexto, es probable que ya hayas experimentado la desilusión que produce la sensación de estar ante un reto no cumplido en cualquier otro ámbito de tu vida. La vida pone límites a planes que hombres y mujeres planifican constantemente.
Porque la incertidumbre está presente en cualquier previsión de aquello que es probable que ocurra, pero no existe una seguridad absoluta de que eso pase. El futuro siempre deja un margen de duda. Por tanto, practica la aceptación que ya has ejercitado en otros ámbitos de tu existencia, para cultivarla en este contexto.
4. No sigas insistiendo
Quizá tengas el propósito de seguir intentándolo. Pero es mejor que te concentres en ti mismo y en tu nuevo proyecto de vida. Tal vez hayas valorado la idea de mantener una amistad con tu ex. Ahora es preferible que no te marques promesas que no puedes cumplir.
Tú no quieres una amistad, deseas ser su pareja. Por tanto, rompe el contacto, deja de tener comunicación con tu ex (si no tenéis otros vínculos muy importantes en común).
Superar una ruptura cuando lo dejas tú o cuando no eres tú quien toma esta decisión es igualmente importante.
5. Las emociones desagradables forman parte de la superación
Quizá te sientas más desanimado en este día ante el efecto de la tristeza o la nostalgia. Las emociones y sentimientos son positivos porque expresan una información relevante sobre ti mismo. Aunque sean desagradables, eso no significa que debas evitarlos. Es natural sentir melancolía ante una despedida. Pero ningún sentimiento dura para siempre.
Irás evolucionando y avanzando hacia una alegría más permanente. Una alegría que también debes cultivar aquí y ahora. Es decir, los instantes sencillos elevan tu ánimo en esta etapa. Una conversación divertida con un amigo te ayuda a distraerte.
6. Deja de repetirte que la ruptura no fue deseada
Eso es algo que ya sabes, pero no necesitas reafirmarte en este mensaje cada vez que compartes la historia con tus amigos. De algún modo, el lenguaje y la forma en la que te comunicas definen tu realidad a corto plazo.
Intenta utilizar palabras y mensajes que te ayuden a cultivar la esperanza. En lugar de vivir pendiente de aquello que no pudo ser, tienes la posibilidad de escribir una nueva página en tu calendario con la máxima creatividad.
7. Quédate con todo el amor de esta historia
Despídete de esa persona y sigue con tu vida. Pero hazlo con los mejores recuerdos de vuestra etapa compartida en común. No idealices lo bueno e ignores lo negativo. Pero valora esos recuerdos porque son la expresión de un tiempo que fue valioso en sí mismo. Uno de los errores habituales de la ruptura es perder la perspectiva de lo que fue.
8. Tu testimonio ayudará a otras personas
A veces, el sentido de una situación se percibe desde una perspectiva distinta cuando se ha superado. Con frecuencia, una historia vivida se convierte en el motor para ayudar a otras personas que se encuentran en esa situación. Es decir, en el futuro, podrás compartir tu aprendizaje vital con quienes superen una ruptura no deseada.
9. Céntrate en aquello que sí deseas
Elabora una lista interminable con todo aquello que sí forma parte de tus prioridades. Es decir, no deseaste esta ruptura. Pero sí quieres comprometerte con otras muchas expectativas posibles. Este ejercicio puede ayudarte a evitar la visión en forma de túnel para ver el horizonte con otros muchos matices.
Por ejemplo, tal vez sí desees conocer amigos para compartir aficiones, ir al cine con más frecuencia, aprender a cocinar o cumplir un sueño profesional.
10. Deja de lado los términos absolutos
Aunque ahora creas que nunca más volverás a enamorarte, cambiarás de opinión en algún momento. Del mismo modo, recuerda que la palabra siempre es muy relativa cuando una afirmación es fruto de la intensidad de una emoción.
¿Cómo avanzar en este capítulo? Hazlo con la máxima esperanza, a pesar de las frases de amor no correspondido. Además, pide ayuda si sientes ansiedad tras una ruptura sentimental.