El amor tiene etapas. Y cada ciclo tiene su aprendizaje esencial. Una de las etapas más conocidas es el enamoramiento. Tal vez porque es ese momento marcado por la magia del factor sorpresa. La sorpresa de vivir una historia con expectativas de futuro en la que hay mucho de ensoñación. Solo las parejas estables recorren las distintas etapas de una historia que va más allá del romanticismo de las señales del enamoramiento.
Cinco etapas del amor de las parejas felices
1. El conocimiento inicial, la curiosidad por tener un mayor acercamiento hacia ese ser tan especial. La sorpresa de experimentar un encuentro marcado por un torrente de emociones que pueden darse en intensidad variable. Por ejemplo, en ocasiones se produce un flechazo. En otras, hay amigos que se enamoran. Por muy bonita que sea esta etapa, es imposible estar en una constante nube de enamoramiento durante toda la vida.
2. Inicio del noviazgo. Aunque generalmente tendemos a poner etiquetas a la realidad que son fruto del convencionalismo, dos personas no formalizan su noviazgo en cuatro citas. En realidad, el lazo emocional surge de un modo gradual, cuando hay un conocimiento más profundo entre ambos. Esta etapa tiene su arraigo en la fase inicial del conocimiento. Pero es un periodo de una mayor implicación afectiva. En esta etapa, la relación no es un pasatiempo, sino un vínculo vivido con mayor compromiso y convencimiento.