Las habilidades de liderazgo pueden desarrollarse en el contexto personal o profesional. Un grupo de amigos está formado por varias personas. En este caso, un buen líder es aquel que influye positivamente en la organización de planes compartidos en común. La visión que cada persona tiene sobre el liderazgo depende de la perspectiva individual. En el blog de mobifriends compartimos 7 consejos para ser un buen líder en un grupo de amigos.
1. No compitas con los demás
En una misma pandilla puede haber diferentes perfiles que destacan por sus habilidades de liderazgo. En ese caso, es importante no establecer una rivalidad, sino una colaboración constante con cada uno de los amigos. El desarrollo de un liderazgo positivo no se afianza desde el ego o el deseo de ser el más popular. La humildad es clave para ser un referente que inspira por su humanismo.
2. Busca y potencia tu mejor versión
Un buen líder inspira un ejemplo positivo en los demás. Un ejemplo que muestra la fuerza que tiene un mensaje cuando se comunica de forma coherente a través de palabras y acciones. En definitiva, cumple tus promesas. No generes expectativas falsas. Cultiva la amistad y los vínculos afectivos desde la búsqueda del bien común.
Potencia tu mejor versión a partir de la amabilidad, la inteligencia emocional, la empatía, el respeto, la sinceridad, la cercanía o la búsqueda de la alegría.
3. Ejerce una labor de mediación
En un grupo de amigos pueden producirse pequeños conflictos que, a veces, se agravan y llegan a estancarse tras el paso del tiempo. En ese caso, el papel de un amigo que es un buen líder puede ser definitivo para ayudar a los demás a avanzar más allá del distanciamiento que se ha generado. En ese caso, es recomendable que facilite el diálogo y la conversación entre las partes implicadas en el asunto.
Es preferible que no dé la razón a alguien en concreto, es decir, es mejor que no se posicione directamente en la situación. Esa posición puede marcar una cercanía con uno de los implicados en el conflicto y, sin embargo, interpretarse desde otro ángulo por quien cree que no ha recibido el apoyo deseado. La mediación, por el contrario, pone el acento en la búsqueda de un acuerdo que sea positivo para todos los miembros del grupo.
4. Observa y aprende de los demás
Un buen líder destaca por su capacidad de observación. El grupo de amigos crea el contexto ideal para que cada amigo aprenda en compañía de los demás. Por otra parte, es recomendable ir más allá de posibles etiquetas y estereotipos. El líder, por ejemplo, no tiene por qué serlo en todo momento porque cada persona tiene facetas diferentes.
5. Liderazgo participativo
Un buen liderazgo es aquel que produce una influencia positiva en uno mismo y en los demás. Un grupo de amigos toma numerosas decisiones en torno a proyectos compartidos. En ese caso, es recomendable fomentar la participación en el grupo para que cada uno dé su opinión al respecto. De este modo, los amigos conversan y llegan a acuerdos para alcanzar objetivos comunes. Las frases de amor y amistad que inspiran con un mensaje de respeto, reconocimiento mutuo y colaboración son muy positivas.
6. Habla en positivo de los demás
Es esencial que los amigos experimenten un verdadero sentimiento de pertenencia en el grupo. También es recomendable que la pandilla no se encierre en sí misma y mantenga la disposición para dar la bienvenida a nuevas personas si se produce esa posibilidad. Los comentarios negativos y las críticas destructivas debilitan la identificación con el grupo. Es decir, rompen las bases de la confianza entre varias personas. Por ello, un buen líder es aquel que observa las virtudes y cualidades positivas de quienes le rodean.
7. Sé un buen amigo
Existen personas que destacan por haber desarrollado sus habilidades de liderazgo. Pero lo verdaderamente importante en un grupo, no es ser el mejor líder, sino ser un buen amigo. Aunque es cierto que un liderazgo positivo es una forma de expresar y demostrar el afecto a través de la búsqueda del bien común. Ser un buen amigo va más allá de ser o no un buen líder. En definitiva, cultiva una verdadera relación de amistad más allá del rol con el que te sientas más cómodo. ¿Qué aspectos te gustaría valorar en ti mismo cuando pase el tiempo y recuerdes tu relación con el grupo en esta etapa?
¿Cómo ser un referente según tu punto de vista? ¿Y cómo tener un sentido del liderazgo que deje una huella positiva en uno mismo y en los demás? En este artículo hemos compartido 7 consejos para ser un buen líder en un grupo de amigos. ¿Qué propuesta te parece la más importante? ¡Muchas gracias por compartir tu opinión!