El noviazgo es una de las épocas más lindas de la relación de pareja. Es la etapa del descubrimiento y conocimiento del otro, del romanticismo y de la pasión a flor de piel.
Es un momento en el cual debes plantearte, qué es lo que buscas y esperas de una pareja.
El amor en esos tiempos de enamoramiento, se vive de una manera muy intensa y es en el noviazgo en donde se van a forjar las bases de una relación sólida, si tenemos la suerte de encontrar a la persona indicada para compartir el resto de nuestra vida.
El noviazgo, comienza con una atracción inicial, matizada por una amistad o relación de complicidad, y una sensación de bienestar y confianza, para luego dar paso al amor.
La época de noviazgo, se caracteriza por tener pensamientos recurrentes hacia la persona que nos gusta, de una manera casi obsesiva, tener deseos compulsivos de verla y estar con ella todo el tiempo, deseos de agradarle en todo, sensaciones nuevas e inexplicables cuando estamos en su presencia y tendencia a la idealización de la persona amada.
Conforme el noviazgo avanza y se va conociendo a la otra persona, se irán transformando gradualmente todo ese cúmulo de sensaciones, y de esta manera se comenzará a tener la certeza de si estamos en presencia o no de nuestra media naranja, de esa persona única y especial con quien elegiremos formar una familia.
La época de noviazgo no tiene una fecha de duración definida. Están los que a los pocos meses de iniciado el noviazgo deciden convivir o casarse y los eternos novios, que pueden llegar a prolongar su estado hasta por una década y no llegar a vivir juntos nunca.
Para vivir y disfrutar de un noviazgo no hay edad, aunque según la experiencia y la edad cronológica de los novios, se expresará más o menos diferente, pero no por ello de una manera menos intensa.
Esta maravillosa etapa, te preparará para una futura convivencia y de cómo lo vivas, dependerá también el futuro de la relación.
Es una época de planificación y de compartir proyectos en común, de afianzar la relación y de fijar metas a corto plazo. Por ello es necesario transitarlo con alegría, respeto, confianza, sinceridad, fidelidad, diálogo y profundo conocimiento del otro, de su entorno y de su familia.
¿Cómo vives o has vivido tú el noviazgo?
Imagen de bacteriano tomada de Flickr