
El final de una amistad puede doler tanto como el desenlace de una historia de amor. Esa pérdida deja un vacío en el alma: por los momentos compartidos, aquello que queda pendiente y la distancia con la otra persona. Especialmente, el dolor crece, especialmente, cuando la decisión no se ha tomado por iniciativa propia, sino que ha surgido de forma externa. Es decir, es un amigo que, desde su libertad, decide dejar de serlo (tal vez ya ni siquiera se sentía identificado con ese rol). Cómo afrontar el duelo por una amistad rota: 5 consejos para sanar la herida.
5 consejos para superar el duelo por una amistad rota
¿Cómo superar ese punto de inflexión y la nueva situación entre ambos? 5 consejos prácticos.
1. No reprimas lo que sientes: expresa tus emociones
Sin embargo, aunque desees compartir con tu amigo cómo te hace sentir su decisión, si ya le has mostrado su deseo de alimentar vuestro vínculo y poner de tu parte para que la historia evolucione de un modo favorable, no insistas más. Busca el espacio seguro que te aporta la empatía de otro buen amigo que valora y respeta tus sentimientos. Es importante que te desahogues y no minimices tu decepción, tu tristeza o la ira que puedes sentir. Es decir, valida, acepta y regular de forma asertiva tus sentimientos, emociones y sensaciones.
2. Habla sobre esa historia como una relación terminada
Si dejas la puerta abierta eternamente ante la expectativa de un reencuentro, cuando la otra persona ya ha mostrado que no está en ese punto, no inicias el proceso de duelo. Sigues pendiente de lo que puede pasar o de la posibilidad de que el lazo vuelva a ser como antes. Por ello, es esencial que empieces a hablar de esta historia como una relación con principio y final.

3. No intentes comprender todas las razones
Existe una tendencia muy humana que surge en las rupturas de pareja o amistad: el deseo de conocer todos los motivos por los que se ha producido un hecho determinado. Sin embargo, cuando se trata de comprender la decisión de otra persona, hay que comprender que es muy probable que el desenlace final sea el resultado de múltiples variables o que, incluso, no exista un motivo perfectamente definido para justificar los hechos.
4. Desdramatiza el final y quédate con lo bueno
Aunque ahora te cueste asumirlo y aceptarlo, con el tiempo te reencontrarás a nivel emocional con esta amistad desde otra perspectiva. Es decir, podrás darle un significado más consciente. Existen muchas historias que terminan en algún momento. Con frecuencia, la distancia se produce de forma gradual entre dos personas que ya no avanzan al mismo ritmo, han cambiado y son poco compatibles o tienen diferentes intereses. Si no se produce una verdadera reciprocidad, es mejor aceptarlo.
Quédate con lo bueno de esa historia. Tal vez consideres que lo ocurrido no es justo para ti. Pero, si quieres superar el proceso de duelo, la lectura que hagas de los hechos es muy importante.
5. Relaciónate con otras personas
Estás en un buen momento, incluso, para conocer gente nueva. Sin embargo, fluye con cada conversación o cada encuentro sin la expectativa constante de hacer amigos. No quieras llenar de forma rápida ese vacío que ha quedado o fortalecer tu autoestima con nuevas amistades que se suman a tu lista de contactos. No dejes que lo vivido con ese alguien tan importante condicione de un modo u otro otras relaciones que están por crearse.
Puedes relacionarte con otras personas en muchos espacios desde la amabilidad o la asertividad, sin que esos lazos estén marcados por la confianza de la amistad: en un curso de formación, en el trabajo, en tu barrio… Es decir, ojalá que tengas la oportunidad de hacer nuevos amigos, pero no te precipites para llenar un vacío emocional.

6. Exterioriza la nostalgia
La nostalgia puede surgir más allá de la etapa inicial que se produce tras la ruptura. Puede volver a brotar con el paso del tiempo. Exterioriza todo aquello que viene a ti en momentos en los que el pasado vuelve a hacer presente. Por ejemplo, escribe tus pensamientos, llama a un amigo para hablar sobre ello, poner palabras a tu nostalgia a través de frases de amor o amistad o disfruta de un paseo en conexión con la naturaleza desde la atención plena.
¿Cómo afrontar el duelo por una amistad rota? Sigue con tu camino sin intentar conocer novedades sobre la situación actual de esa persona a través de sus redes sociales. Alimenta tu bienestar interno con ingredientes que son una auténtica medicina: abrazos, palabras de ánimo, relaciones nutritivas, paseos en conexión con la naturaleza, descanso, cine… ¿Alguna vez has perdido la confianza de forma definitiva en una relación de amistad? ¿Y cómo superaste ese dolor por la pérdida? ¡Comparte tus consejos y reflexiones de ayuda para quienes ahora estén pasando por ese proceso!