En la actualidad, aumentan las rupturas de parejas tras los 50, 60, 70 y 80 años. El proceso puede ser muy complejo para uno o ambos. Especialmente, cuando la iniciativa se sitúa más allá de los 70. En el blog de mobifriends reflexionamos sobre el divorcio gris: cómo superar una ruptura a los 50 o 60 años.
Generalmente, no es fácil superar una ruptura de pareja. Sin embargo, cuando el final se produce a los 50 o 60 años, el proceso del desamor es todavía más intenso. En ese caso, se produce una circunstancia específica: la persona había visualizado un futuro en común. Y ocurre algo que cambia el ritmo de los acontecimientos de forma definitiva. El divorcio gris es un fenómeno en crecimiento en la sociedad actual.
1. Conecta con el presente y crea un nuevo proyecto de vida
El pasado en común, aunque cueste aceptarlo, ha quedado atrás. Ha llegado el momento de reinventarse, emprender otro camino y evolucionar en una dirección distinta. Conecta con el presente a través de planes y actividades que te aportan una fuente de entretenimiento.
2. La amistad y la familia: un excelente refugio para superar una ruptura
Tras un divorcio, puede surgir un intenso sentimiento de soledad. La convivencia ha quedado atrás y el silencio se convierte en el protagonista del hogar (si no residen otras personas en el inmueble). En ese caso, la amistad y la familia proporcionan un importante apoyo a nivel emocional. Sin embargo, conviene buscar el equilibrio.
Aunque a nivel interno necesites más atención, apoyo y consuelo, recuerda que cada uno de tus amigos tiene sus propias circunstancias y necesidades. Es decir, intenta reducir las expectativas y no te sitúes únicamente en la perspectiva de alguien que recibe ayuda. Tú también puedes ofrecer tu compañía, tu sentido del humor y tu apoyo a los demás.
3. Haz el periodo de duelo para superar la ruptura a los 50 o 60
En toda relación de pareja que ha sido significativa, se produce un proceso de duelo. La persona necesita despedirse a nivel interno de una historia que le ha acompañado durante años. Por ello, el divorcio gris tiene una complejidad añadida. No es fácil decir adiós a toda una vida en común. Sin embargo, no se trata de despedirse de forma literal de todo lo vivido. Puedes quedarte con los mejores momentos y las lecciones aprendidas.
Además, no cierres la puerta a la posibilidad de mantener la amistad (si el balance es positivo a nivel afectivo). No tienes que decidirlo ahora ya que, además, es una cuestión que no depende solo de ti. Pero quizá, si habéis compartido mucho tiempo en común, cada uno pueda seguir siendo un apoyo en la vida del otro.
4. El divorcio gris puede convertirse en una gran oportunidad para ser feliz
Si el divorcio se produce en esta etapa, es un síntoma de que la relación previa ya tenía un profundo desgaste. A esa edad, tomando como referencia la esperanza de vida actual, el ser humano tiene más pasado que futuro. Pero ese no debería ser un motivo para permanecer estancado en un vínculo infeliz.
La ruptura también es un acto de valentía, libertad y determinación para abrir nuevas puertas. Desde esta perspectiva, la ruptura a los 50 o los 60, aunque no resulte sencilla, puede transformarse en una excelente oportunidad para recuperar la calma y la tranquilidad.
Las frases de amor se transforman en el divorcio gris. Pero siguen muy presentes en tu vida: observa toda la belleza y los motivos de gratitud que irrumpen en tu existencia.
5. El divorcio gris tampoco es fácil para el entorno
Recuerda que los amigos, padres o hermanos no tienen por qué posicionarse en la ruptura. Tampoco los hijos, en el caso de aquellas parejas que habían formado su propia familia. De hecho, es muy posible que la nueva situación también sea difícil de asimilar para algunos de ellos. En ese caso, dales tiempo para adaptarse a los cambios. El tiempo suele ser un gran aliado porque aporta un nuevo contexto.
6. Recupera algún proyecto pendiente
Una etapa de tu vida sentimental ha quedado atrás. Has experimentado un punto de inflexión. En algunos casos, hay tiempo para las segundas oportunidades. Sin embargo, la ruptura también puede ser definitiva (y es muy probable que lo sea). ¿Cómo alimentar la ilusión en este contexto? ¿Qué hacer para mirar hacia el futuro? Este es un buen momento para recuperar algún proyecto pendiente como, por ejemplo, ese viaje que has aplazado durante meses o años.
El divorcio gris es un fenómeno creciente que refleja cómo la perspectiva de una persona de 50 años en la actualidad, es diferente a la visión habitual en esa edad hace algunas décadas. La esperanza de vida ha aumentado. En consecuencia, más allá de los 50 años, existen muchas oportunidades para cambiar, evolucionar y emprender nuevos caminos. ¿Conoces a alguien que ha superado un divorcio gris? ¿Te sientes identificado con la posibilidad de romper tu relación en la madurez? Divorcio gris: cómo superar una ruptura a los 50 o 60 años. ¡Cuéntanos tu experiencia!