¿Has iniciado el Año Nuevo con el firme deseo de buscar el amor y enamorarte? Es un objetivo habitual en estas fechas y en otros muchos momentos del año. Y, sin duda, la magia del propio amor correspondido reside en que no hay un manual de instrucciones para encontrarlo o conservarlo. Sin embargo, sí hay fallos que conviene evitar en la interacción con el otro. Cuáles son las peores estrategias para ligar: 7 errores a evitar con ellos o ellas.
1. Demostrar una indiferencia excesiva y de forma prolongada
La indiferencia puede utilizarse de forma consciente para no hacer sentir a la otra persona que giras constantemente alrededor de su mundo. Sin embargo, cuando este mecanismo se convierte en la norma predominante del proceso de seducción, existe el riesgo de que el interlocutor lo interprete de forma literal. Es decir, puede llegar a creer que no sientes nada por él/ella.
2. Esperar a que sea el otro quien tome toda la iniciativa
Quizá eso suceda, es decir, tal vez la otra persona asuma el protagonismo en el proceso de conquista. Pero tambien puede ocurrir que no se anime a avanzar si es muy tímido, por ejemplo. Si una persona te gusta de verdad, pero esperas que sea ella quien tome la iniciativa, estás delegando tu propia capacidad para expresar sentimientos en alguien externo. ¿Quieres actuar como el protagonista de tu propia historia o prefieres adoptar un papel más secundario?
3. Aparentar ser alguien diferente
Es natural que cuando conoces a alguien que te gusta, quieras mostrar tu mejor versión en tus interacciones. Simplemente, quieres gustarle. Por tanto, tratas de impresionarle positivamente y de agradarle. Para ello, es aconsejable que te centres en tus fortalezas, habilidades positivas, encanto personal, sentido del humor…
Pero en ningún caso es recomendable que te muestres de un modo diferente a como eres en realidad. Esa máscara puede mantenerse durante un tiempo muy breve. Aunque en algún momento cae por su propio peso.
4. Darle celos con otra persona
Si intentas darle celos con otra persona, tal vez lo logres. ¿Pero cuál es el objetivo de esa forma de actuar? En ese caso, no estás haciéndole sentir especial, sino que puede llegar a creer que hay alguien que ocupa tu corazón de un modo más importante.
Dar celos con otra persona es una estrategia frecuente en el ámbito de la seducción. En algún momento puntual puede producir un efecto aparentemente positivo a corto plazo. Sin embargo, no es saludable intentar mantener la atención de alguien a través de esta vía (supone añadir un elemento externo en el propio vínculo que quieres crear). Tus frases de amor para enamorar deben dirigirse a él/ella.
5. Insistir y perseverar hasta el infinito
Si la otra persona no da muestras de interés o ha expresado con claridad sus sentimientos, puedes creer que existe una mínima posibilidad de que cambie de opinión. Es cierto, en el futuro pueden suceder numerosas hipótesis y realidades diferentes.
Pero es más probable que la posición de esa persona respecto a este tema siga siendo exactamente la misma (o que incluso se muestre más distante todavía si sigues insistiendo hasta el infinito). La perseverancia puede ser una virtud en el proceso de seducción (siempre que se aplica con equilibrio, realismo y sentido común).
6. Hablar continuamente de uno mismo para impresionar a la otra persona
A veces, el deseo es tan intenso que surge el propósito de querer mostrar lo mejor de uno mismo ante el otro. Es decir, quizá quieras mostrarle tu mundo y hablarle de todo lo que es importante para ti: trabajo, familia, amigos, aficiones personales, aprendizaje…
Sin embargo, si el proceso de seducción gira de forma permanentemente en torno al yo, entonces, el interlocutor queda fuera de la ecuación. Es decir, él/ella no encuentra el espacio necesario para expresarse y compartir información.
7. Jugar con los sentimientos de la otra persona
Hay un error importante que conviene evitar a través de la responsabilidad afectiva. Jugar con los sentimientos de la otra persona produce consecuencias. A veces, quien comete este error, no es plenamente consciente de cómo puede llegar a sentirse el otro.
El mundo del corazón y de los sentimientos puede ser complejo. Por ejemplo, tal vez te guste alguien y todavía no sepas si quieres implicarte en una relación. Tienes todo el tiempo que necesites para reflexionar al respecto o cambiar de opinión. Sin embargo, si crees que solo te gustaría mantener una amistad, entonces, no intentes retener el interés de la otra persona solo porque te resulta agradable, alimenta tu propio ego y te hace sentir bien.
¿Cuáles son las peores estrategias para ligar desde tu punto de vista? En general, intenta evitar aquellas acciones, comportamientos o actitudes que te hacen sentir incómodo. Sencillamente, si te gusta otra persona, busca tu propio camino para acercarte a ella y dejarte conocer. Que la incertidumbre que puedes llegar a sentir cuando piensas en el futuro no detenga tus pasos.