Cuando nos proponemos buscar pareja, generalmente lo hacemos con la intención de encontrar una persona que comparta nuestros mismos intereses. En base a las afinidades, es que nos sentimos atraídos por una u otra persona.

Es normal que al comienzo de la relación, en la etapa de pleno enamoramiento, nos olvidemos de nuestros intereses personales, para dedicarle todo el tiempo libre a nuestro amor, pero también es normal que con el tiempo, nos sintamos nuevamente interesados en retomar aquellas cosas externas a la pareja, que nos solían gustar o hacernos sentir bien. Es ahí, en donde comienzan a existir peleas y roces en la pareja, ya que la otra persona puede llegar a sentirse desplazada o dejada de lado.

Una buena idea en ese momento, es acordarse de aquellas cosas que en el principio de la relación nos unieron y volver a compartirlas juntos, al menos una vez de tanto en tanto. El cine, salir a tomar un café, asistir a algún espectáculo, salir a andar en bicicleta, son buenos planes para realizar en pareja y una buena manera de seguir compartiendo aficiones con la persona amada.

Sin embargo no hay nada de malo en tener gustos o actividades distintas, o sólo reservadas para realizar fuera de la relación.

Es importante saber, que es muy sano tener actividades fuera de la pareja, sobre todo si estamos hablando de actividades deportivas, recreativas o que nos ayuden a desarrollarnos plenamente como personas, y esto no significa en absoluto que hayamos dejado de querer a la otra persona o dejemos de estar interesados en pasar tiempo juntos.

Conocer amigos y compartir tiempo con otras personas, no tiene porque ser un problema en la pareja. Todos necesitamos un tiempo para nosotros mismos y un espacio en donde canalizar nuestras energías; a algunos les dará por la salida con amigos, a otros por practicar algún deporte, a otros por estudiar.

Negocia, establece días y horarios para tus aficiones, cede, equilibra y por sobre todas las cosas aprende a entender las necesidades del otro, sabiendo que sigue siendo un “individuo”, que necesita cierta independencia para relacionarse con pares y con su “yo interior”.

En base a esta premisa, seguramente conseguirás armonizar la pareja y a conciliar estos dos aspectos tan importantes de tu vida.

¿Cómo haces para conciliar tu relación de pareja y tus aficiones?

Imagen de mikebaird tomada de Flickr