Muchos países se preparan para recibir el verano, y con el calor, también resurgen las ganas de encontrar pareja y estar enamorados.

La temporada estival, así como la primavera, es la época más propicia para enamorarse y ligar. Varios estudios afirman que en verano, es cuando se forman más parejas, dado que las condiciones en esta época del año son óptimas para que florezca el amor o por lo menos para entrar en la etapa de enamoramiento.

El calor, el sol, la liberación de ropa, los cuerpos más al descubierto, la playa, hacen del verano un cóctel explosivo y muy difícil de resistirse a sus encantos. Los estímulos visuales en esta estación aumentan y con ellos, también lo hace el erotismo y el deseo.

Según los expertos, son factores ambientales y hormonales los que influyen en que tanto hombres como mujeres, estén más predispuestos a vivir un romance en el verano, ¿pero porqué ocurre esto? El hecho de estar relajados por la temporada de vacaciones, sin compromisos ni apuros por cumplir horarios, son factores que parecen predisponernos a estar más receptivos a conocer gente con la idea de disfrutar del amor.

Con el verano, las endorfinas y feromonas, hormonas que nos mantiene alegres y activos, están a flor de piel, otra de las condiciones que contribuyen a que estemos más abiertos al amor y a la atracción. Todas estas condiciones nos hacen más vulnerables a asumir una relación que puede cambiarnos la vida.

Si bien es cierto que en el verano surgen muchos “amores de verano”, que dura lo que dura la temporada de calor para luego esfumarse, también es cierto que muchas parejas consiguen sobrevivir para consolidarse como relaciones estables y duraderas. Todo dependerá de que hayas encontrado la persona indicada y de las ganas de ambos por seguir juntos.

En el caso de las parejas consolidadas y que vienen de tiempo, el verano puede poner a prueba la pareja. El hecho de compartir mayor cantidad de tiempo juntos, hace que pueden surgir roces y que la relación se desgaste. Razón por la cual deberás poner en práctica la tolerancia y la buena voluntad para aprovechar el verano y las vacaciones para afianzar la pareja, en lugar de boicotearla.

Cualquiera sea nuestra situación, lo que no podemos negar, es que con la llegada del verano, las energías parecen renovarse y esto nos pone en un estado mental más optimista, condiciones necesarias para buscar amor y poder disfrutarlo en plenitud.

¿Cómo te preparas tú para vivir el verano?

Imagen de pasotraspaso tomada de Flickr