En la actualidad, la Selección Española es protagonista en grado extremo al convertir en realidad el sueño español de protagonizar la final del mundial de fútbol de Sudáfrica 2010. El espíritu deportivo se trasnforma en colectivo en cuestión de un instante gracias a la fuerza mediática de los medios de comunicación de masas. La labor de la televisión en este sentido es enorme.
Sin embargo, os preguntaréis ¿Qué tiene que ver el deporte con el amor? Pues al parecer mucho, ya que según han afirmado recientemente los informativos, se produce un aumento de la natalidad muy destacado en aquellos momentos históricos en los que se produjo un importante éxito deportivo (con la consecuente euforia popular desatada en la celebración).Este dato es muy sorprendente si tenemos en cuenta el envejecimiento progresivo de la población. La pirámide demográfica ofrece datos muy significativos en este sentido. Aumenta el número de personas mayores pertenecientes a la tercera edad mientras que disminuye el número de niños. Los motivos son diversos: las parejas cada vez se casan más tarde, además, también las dificultades económicas para comprar una vivienda son alarmantes. En la actualidad, los jóvenes universitarios tienen problemas para encontrar un trabajo estable en el mundo laboral al terminar sus estudios universitarios.
Los triunfos deportivos influyen tanto en el amor que también los futbolistas o tenistas tienen un enorme eco en la prensa del corazón convirtiéndose en noticia. Un ejemplo más que evidente lo tenemos en el caso de la periodista Sara Carbonero que ha ocupado páginas y páginas en la prensa del corazón elicpsando incluso a las verdaderas estrellas del mundial. Lo mismo le sucede al tenista español, Feliciano López que este verano ha protagonizado diversas polémicas. Primero, con el embarazo de la modelo Maria José Suárez, con la ruptura sentimental definitiva después de una relación guadiana y ahora con la tristeza producida por la pérdida del niño. Incluso, todos hemos quedado sorprendidos ante una de las parejas del verano: la guapa modelo argentina Martina Klein y Alex Corretja.
Habrá que esperar un tiempo para poder conocer si los índices de natalidad aumentan este año gracias al papel tan brillante de los futbolistas españoles en Sudáfrica. Sin embargo, se trata de un fenómeno natural si atendemos a las emociones.
Mientras que en momentos de tristeza o soledad tendemos a aislarnos de los demás, cuando estamos en un periodo de plenitud como consecuencia de una alegría popular intensa estamos más receptivos a dar y recibir. Una euforia que conduce a la pasión. Al redescubrimiento del ser querido. En ciertos momentos, parece que el cielo se roza con los dedos gracias al espíritu de La Roja. Esperemos que este espíritu dure todo el año y se prolongue en los corazones como un eco eterno.