A veces, estamos tan inmersos en las obligaciones de la rutina cotidiana e incluso, en hipótesis de futuro que perdemos de vista lo que de verdad importa en cada momento: el amor. El amor entendido en su sentido más amplio. Es decir, comenzando por la autoestima como pilar del desarrollo personal hasta interiorizar el valor de relaciones tan esenciales como la amistad, la pareja, el compañerismo, la familia, la solidaridad…
Las circunstancias de la vida cambian, es decir, puede que en un momento determinado una persona esté en pareja mientras que en otra etapa esté soltera. Puede suceder que una persona tenga una vida social muy intensa en la etapa universitaria y una vez iniciada la vida profesional, su agenda de actividades sea más reducida. La situación personal puede cambiar, sin embargo, lo verdaderamente importante es que el amor permanezca.
La realidad es que el amor es el mejor regalo que cualquier persona puede recibir en Navidad pero también, durante el resto del año. Un afecto que se muestra a través de los elogios positivos, una palabra de ánimo, un mensaje de afecto, una demostración de gratitud… Puede suceder que una persona se dé cuenta en Navidad de que ha descuidado algunas relaciones personales durante el año, sin embargo, no solo debemos centrar este balance en las relaciones personales con los demás sino que también es vital profundizar en cómo nos sentimos con nosotros mismos.
Se trata de mirar dentro de ti para comprobar si te has cuidado o, por el contrario, no te has prestado el tiempo suficiente a ti mismo. La idea de vivir creyendo que siempre hay algo más urgente que mirar dentro de uno mismo, es un error. La Navidad como cierre de un ciclo y paso hacia una nueva etapa (el inicio de un nuevo año) llega cargada de nuevas esperanzas e ilusiones.
El amor hacia los demás fluye de una forma más natural cuando nos sentimos bien con nosotros mismos. De lo contrario, una persona que arrastra un conflicto interior importante proyecta sus miedos e inseguridades en sus relaciones con los demás. El camino no siempre es sencillo pero la vida es un aprendizaje fascinante: toma tu experiencia como tu mejor impulso hacia tu verdadera felicidad.
Este camino se recorre mejor en compañía. Por tanto, durante las próximas fiestas de Navidad, brinda por la ilusión compartida de vivir en letras mayúsculas.
Foto – Vida en Equilibrio
Una respuesta a “El amor es el mejor regalo de Navidad”
ola busco pareja estable no tengo foto porque no supe subirla sy nuebo en esto mil disculpas