La codependencia es una característica que se ve con frecuencia en muchas personas y en las relaciones de pareja.
Las personas que establecen vínculos en donde la codependencia se encuentra presente, no consiguen nunca estar satisfechas o completamente felices. No están a gusto ni estando en pareja ni estando solas.
La codependencia es un tipo de adicción, una adicción al amor y se caracteriza por establecer una relación patológica con la otra persona. Es una situación que se va dando progresivamente, generando en muchos casos, alteraciones en el plano físico, emocional y social.
Hay personas que siempre tienden a enamorarse de otras que necesitan ayuda, para de esta manera sentirse útiles y queridas. No es raro para ellas, enamorarse de personas enfermas, con adiciones o que padecen algún otro tipo de problemas.
Una persona codependiente, puede llegar a soportar situaciones extremas por parte de su pareja, tales como malos tratos, violencia, humillaciones, con tal de no enfrentar una separación o por miedo de ser abandonada. La persona codependiente puede ser amorosa en extremo o por el contrario desapegada.
Buscan controlar la vida de los demás, para evitar hacerse cargo de los problemas propios, generalmente son personas sobreprotectoras que llegan a perder su propia identidad.
Se puede salir de la codependencia, siempre y cuando uno sea conciente de que existe un problema y una relación enfermiza, y en muchos casos es necesaria la ayuda de un profesional de la salud para afrontar este cambio.
El codependiente rara vez se da cuenta por sí mismo de su problema, es por ello que el entorno juega un rol fundamental en su recuperación.
Salir de la codependencia supone vivir la propia vida, solucionar tus propios problemas y aprende a convivir con ellos.
Para esto es necesario el desapego, dejar al otro ser como es, darle la libertad de acción y la libertad en la toma de decisiones, sin que esto suponga un abandono, una falta de responsabilidad o compromiso.
Dejar de ser codependiente supone ser responsable de las propias elecciones, identificando los deseos y necesidades propias, encontrando el camino para satisfacerlas.
Abandonar la codependencia implica disfrutar de la vida y del amor, ¡algo que todos nos merecemos!
Imagen de Pink Sherbet tomada de Flickr