Temas de conversación para la primera cita

Muchas personas tienen miedo de quedarse bloqueadas y sin temas de conversación por esos nervios propios del primer encuentro, por no saber exactamente de qué hablar en la primera cita o por querer salvar los silencios incómodos que pueden surgir a lo largo de la velada. De hecho, si en una primera cita surgen muchos silencios, esto causa incomodidad a ambos. Hombres y mujeres quieren agradar en su primera cita, por esta razón, además de elegir un look acorde para ese primer encuentro, también quieren hablar sobre temas de conversación que puedan ser informales, distendidos y no muy personales.

De qué no hablar en la primera cita

En primer lugar, es recomendable tener en cuenta de qué no hablar en esa primera cita: evita poner sobre la mesa cualquier posible mal de amores que hayas vivido previamente, no compartas tus problemas personales o tus preocupaciones de futuro, no detalles tus diferencias con un familiar con el que no tienes una relación estrecha. Y es conveniente que no hables de temas tan íntimos, simplemente, porque no conoces tanto a tu acompañante como para abrir tu corazón de par en par. La confianza es un regalo que debes depositar en quien consideres que sabrá respetar tu privacidad. Nada de frases de amor para flirtear en una primera cita.

Tampoco es conveniente hablar en una primera cita sobre tus deseos de casarte pronto o formar una familia. El deseo de estar enamorado lleva a algunos hombres y mujeres solteras a mostar impaciencia por encontrar pareja. Sin embargo, esta ansiedad aleja porque resulta muy precipitada.

En el caso de que ambos tengáis amigos comunes, no hagas ningún tipo de comentario negativo sobre ellos. Sin embargo, sí puedes aprovechar este nexo de unión para compartir anécdotas divertidas.

De qué hablar en la primera cita

Por ejemplo, puedes charlar sobre qué te gusta hacer durante tu tiempo libre, cuáles son las aficiones a las que dedicas más atención, qué actividades haces habitualmente. Por ejemplo, si eres un apasionado del cine, puedes comentar alguna película que hayas visto últimamente.

A su vez, puedes aprovechar ese momento para preguntarle si a él/ella también le gusta el séptimo arte. Y en caso de que así sea, podéis profundizar más en torno a este tema. Por ejemplo, podéis poner en común cuáles han sido vuestras películas preferidas, puedes enumerar qué actores y actrices admiras de verdad o también, si te gustó más el libro que la película en el caso de aquellas obras literarias que fueron adaptadas al cine. Incluso en el caso de que a tu acompañante no le guste el cine, es muy probable que sí haya oído hablar del último taquillazo que todo el mundo comenta.

También podéis intercambiar experiencias personales y comentar en común cuáles son vuestros respectivos trabajos, cómo es un día normal en vuestra oficina y si te gusta lo que haces, seguro que logras transmitir esa pasión de la vocación profesional. A su vez, puedes mostrar interés por conocer más detalles sobre aquello que hace y a qué se dedica. Hazlo si notas que le gusta su trabajo, en caso contrario, hablar del tema le resultará muy aburrido.

También podéis hablar sobre qué estudiasteis y en caso de haber ido a la universidad, contar alguna anécdota de aquella etapa ya que la vida universitaria deja un recuerdo especial en la memoria.

Si eres voluntario de una organización con la que colaboras habitualmente realizando una tarea concreta, por ejemplo, si colaboras con una biblioteca llevando al domicilio de algunas personas enfermas los libros que han solicitado, también puedes explicar lo feliz que te hace esta tarea. Habla sobre rutinas personales que te alegran el día.

En una primera cita también se pueden tocar temas de conversación superficiales como, por ejemplo, el de los horóscopos. Evidentemente, se trata de un tema que no da mucho de sí pero suele producir algún comentario gracioso. Si te gusta viajar, si tienes previsto hacer alguna excursión o una escapada próximamente, o todavía guardas el recuerdo agradable de tus últimas vacaciones, comparte detalles de tu lugar de destino. En torno a las vacaciones también puedes encontrar muchos temas de los que hablar: qué destino te gustaría conocer, qué lugar ha marcado tu vida, si prefieres los viajes de playa o de montaña, si viajas con frecuencia por motivos de trabajo…

Puedes romper el hielo hablando sobre algo que hayas hecho durante ese día. Al igual que le puedes preguntar si ha tenido una buena mañana. Además, el hombre perfecto y la mujer ideal se muestran especialmente más allá de esa primera impresión que produce el aspecto físico. Conoce a tu acompañante, observa su saber estar, sus puntos de vista y sus inquietudes personales.

Tomar la iniciativa en la conversación

Es recomendable que tomes la iniciativa durante la conversación, lidera la charla. Aporta ideas. Disfruta del momento y confía en que una vez que se rompe el hielo durante la cita, todo empieza a fluir de un modo natural. Muchas historias de amor surgen a partir de una primera cita. El inicio de una historia es más bonito cuando surge a partir de conversaciones que nutren, es decir, intenta que en tu conversación haya muchas palabras con un significado positivo.