Los halagos, son las palabras más poderosas que se pueden utilizar para seducir a alguien y además pronunciarlos, constituyen un buen ejercicio para enriquecer y fortalecer una pareja ya constituida.
Cuando otra persona nos halaga, nuestro cerebro segrega sustancias que estimulan el placer y más allá de llenarnos de felicidad, nos predispone para un encuentro íntimo y sumamente excitante.
Los halagos nos ayudan a elevar la autoestima y nos dan la pauta de que le atraemos a otra persona o por lo menos, que no le somos indiferentes. A todos nos gusta que nos endulcen los oídos con palabras delicadas, por ello el decir y recibir halagos, deberían ser una práctica corriente en las relaciones humanas.
Existen diferentes tipos de halagos, y no todos ellos, conllevan una connotación sexual o amorosa, dado que también se pueden utilizar los halagos en las relaciones entre amigos o familiares.
Los halagos tienen que ser una expresión de admiración sincera, no obstante, no todas las personas son capaces de poner en palabras sus sentimientos más profundos y de desplegar todos sus encantos para atraer a la persona que le interesa.
Si lo que deseamos es conquistar a alguien, existen ciertos ejercicios que los expertos recomiendan poner en práctica poder llegar a seducir con halagos. El halago para causar el efecto deseado, debe ser:
Sincero y personalizado
Deber ser espontáneo
Tiene que ser enfático
Debe ir acompañado de un tono de voz convincente
Se debe pronunciar mirando a los ojos de la persona que se halaga
Deben expresar sentimientos positivos
Los halagos deben sonar naturales, sinceros y éstos no deben hacerse en exceso justamente para no dar la impresión de algo estudiado, forzado o premeditado.
Es importante tener en cuenta la entonación que se emplea para decir un halago. El tono de voz adecuado, puede resultar irresistible y convertirse en una efectiva arma de seducción.
Al respecto, es recomendable usar un tono de voz bajo, suave y sensual. La distancia física también es importante, cuanto más cerca nos encontremos de la persona a la cual va dirigida el halago, más efectivo será el mismo.
El halago tiene por objetivo hacer sentir especial y única a la otra persona. Seducir con las palabras, es tanto o más importante que hacerlo utilizando el lenguaje corporal.
Los halagos, constituyen el lenguaje por excelencia para seducir, no dudes en ponerlos en práctica con tu pareja o con aquella persona que deseas conquistar.
Imagen de Yo adolescente tomada de Flickr