El amor no sólo está marcado por citas románticas, momentos de ensueño, vivencias inolvidables y sentimientos a flor de piel. En el amor también hay momentos de rutina y de situaciones cotidianas, por ejemplo, la realización de las tareas de la casa muestra el lado más pragmático de la convivencia. Tener un hogar confortable y ordenado es importante para tener una comodidad y un bienestar emocional. Cuando dos personas llegan cansadas del trabajo a casa es posible discutir por las tareas de la casa cuando no existe una buena organización.
¿Cómo evitar esta actitud?