• Cómo compatibilizar amigos y pareja

    amigos y pareja

    Días atrás, hablábamos acerca de la importancia de conservar a nuestros amigos aún cuando nos encontremos en pareja. Hoy te daré algunos consejos para compatibilizar estos dos importantes vínculos personales.

    La vida en pareja demanda tiempo y atenciones que no podemos descuidar, y en ocasiones, los amigos pueden sentirse desplazados y las relaciones de amistad verse resentidas por motivo de celos, o porque a nuestros amigos, no les cae bien nuestra nueva conquista.

    Si este es el caso, nuestro amigo tendrá que entender que esa es la persona que hemos elegido para que nos acompañe y que como tal debe respetarla, así y todo, es mejor no forzar la relación entre ellos ni tratar de presionar a ninguno de los dos para que entablen una relación de cordialidad.

    Los mayores problemas se dan cuando uno de los miembros de la pareja, es más sociable o tiene más amigos que el otro, entonces la otra persona puede llegar a sentir que se la está  dejando de lado.

    Compatibilizar amigos y pareja es posible: sólo es cuestión de ser tolerantes y poner buena voluntad de ambas partes. Estos son los consejos que pueden ayudarte a tener una mejor relación con tus amigos y pareja, ¡toma nota!:

    Encontrar tiempo para compartir con nuestros amigos: es preferible buscar momentos a solas para compartir con nuestro amigo sin necesidad de la presencia de nuestra pareja. Es interesante poder compartir los amigos con la pareja, pero muchas veces esto no puede darse y antes de tener relaciones conflictivas o insatisfactorias, es preferible que tus amigos sigan siendo tuyos y no de la pareja.

    Conciliar amigos y pareja: en este sentido habrá que establecer reglas con nuestra pareja y dejar en claro que es importante para nosotros poder conservar a nuestro amigo. Será necesario encontrar un equilibrio para poder dedicarle tiempo a ambos, sin que esto deteriore ninguno de los dos vínculos.

    Resolver los conflictos de pareja con la pareja: Por más que seamos confidentes de nuestros amigos y podamos recurrir a ellos para contarles todos nuestros problemas, incluidos los de pareja, hay que evitar involucrar a nuestros amigos en nuestros conflictos personales y tratar de tomar siempre nuestras propias decisiones. Los problemas de pareja deben charlarse y resolverse entre los miembros de la pareja y evitar dejarse influir por opiniones de terceros.

    Proteger la intimidad de la pareja: toda pareja reciente necesita intimidad y tiempo para estar a solas. La pareja es de a dos y no es bueno dejarse invadir, ni siquiera por nuestros amigos.

    Las amistades y las relaciones sociales son muy importantes y es algo que nutre de alguna manera a la pareja, por lo que es positivo seguir conservando a nuestros amigos de toda la vida, claro sin descuidar nuestro amor. Espero que con estos consejos puedas conseguirlo.

    Imagen de clspeace tomada de Flickr


  • Amores patológicos

    Hoy hablaremos de los amores patológicos. Hay “amores que matan”, como lo dice la popular frase, y no siempre el amor es sinónimo de salud, felicidad y armonía, aunque en realidad debería aclarar que el amor patológico, no es amor verdadero.

    Los amores patológicos o enfermizos, son aquellos que provocan daño, rechazo y que son capaces verdaderamente de enfermar, tanto a quien lo experimenta, como a quien es objeto de ese amor tóxico.

    Los amores patológicos, tienen lugar en aquellas personas con desequilibrios mentales, o en personas inmaduras, inseguras o que tienen autoestima baja, aunque en un principio de la relación, no podamos reconocer en ellas los signos de un amor enfermizo.

    Los tipos de amores patológicos más frecuente, son la co-dependencia y la celotipia. Mientras que la primera, es un exceso de dependencia excesiva física y emocional de la otra persona, con tintes obsesivos, posesivos y destructivos, la celotipia, se caracteriza por experimentar celos irracionales y por suponer supuestas infidelidades por parte de la pareja, cuando esto no tiene ningún asidero posible.

    La violencia en la pareja, también puede ser considerada un tipo de amor patológico, y ya hemos visto que esto desgraciadamente, es una situación muy frecuente.

    Todo amor, debe ser capaz de proveer paz, felicidad, seguridad, contención, equilibrio, aún en los momentos más críticos de una relación. Cuando lo que creemos que es amor provoca tristeza, depresión, frustración, angustia, enojo, amargura, infelicidad, entonces seguramente estamos en presencia de un amor patológico.

    Los amores patológicos pueden provocar enfermedad, hasta situaciones más graves como homicidio y suicidio. Por ello es importante poder identificar cuando un amor es verdadero y cuando estamos en presencia de uno enfermo, para evitar de esta manera situaciones que luego tengamos que lamentar.

    Alejarnos a tiempo de aquellas personas que no nos hacen bien y que son capaces de herirnos en nombre de un falso “amor”, es la clave para huir a tiempo de una relación dañina y perturbadora.

    Nadie dice que en el amor todo sea color rosa, todas las relaciones pasan por sus altibajos, por crisis de pareja, por situaciones conflictivas y confusas, pero de ningún modo estas relaciones deben ser capaces de lastimarnos, de humillarnos o de hostigarnos, de lo contrario, tendríamos que plantearnos la posibilidad de que estamos en presencia de un amor patológico, que no nos conducirá a nada positivo.

    ¿Has vivido alguna vez un amor de este tipo?

    Imagen de Ana _Cotta tomada de Flickr


  • Cómo el estrés puede afectar a la pareja

    Hace pocos días comentamos en el blog, un estudio que afirma que estar en pareja reduce el estrés, en base a distintas pruebas realizadas. Ahora bien, si la carga de estrés es alta o resulta muy difícil de manejar por uno de los integrantes de la pareja, es allí entonces en donde pueden surgir los problemas.

    Una pareja para que esté en armonía, debe estar en equilibrio emocional pero también físico. Si existe un detonante que altere ese equilibrio, como pueden ser las presiones laborales o los problemas económicos que comúnmente provocan estrés, entonces la relación sentimental también se verá afectada.

    En los tiempos que corren, es habitual sentirse estresado y algunos de los síntomas que podemos experimentar son: irritabilidad, cansancio extremo, nerviosismo, insomnio, problemas nerviosos o cardíacos. Señales de alarma que nos envía el organismo y que no podemos ignorar.

    Cómo puede el estrés afectar a la pareja

    Según los especialistas, las razones por las que el estrés afecta a la pareja, pueden ser varias. Cuando alguien padece de estrés, lo primero que se reciente es la comunicación en la pareja.

    La rutina, caer en constantes peleas de pareja o en alguna infidelidad, pueden ser algunas de las consecuencias de este desgaste en la relación.

    El estrés también puede originar problemas sexuales. Impotencia, falta de deseo sexual tanto en el hombre como en la mujer, son los principales efectos en el terreno sexual.

    Las personas hiperactivas, ambiciosas o competitivas, son las más proclives a sufrir de estrés y por consiguiente ver resentida su relación de pareja.

    Cómo hacerle frente al estrés

    El realizar ejercicio físico, ejercicios de relajación como el yoga o el Reiki, las caminatas, tomarse unas vacaciones, planear una salida en pareja, promover el diálogo, disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, tomarse un tiempo para si mismo, son algunas de las claves para superar con éxito el estrés.

    Si una relación de pareja se deteriora o se rompe, es producto de diversos factores además del estrés, pero sin dudas este último, contribuye en gran medida a favorecer esta situación.

    Por ello es importante identificar los signos de alerta a tiempo, para poder corregir nuestra respuesta a las presiones cotidianas, y si lo amerita buscar ayuda externa de un profesional de la salud, para encauzar la relación de pareja a tiempo y evitar así, situaciones irremediables, tanto en el plano amoroso como en el organismo.

    Imagen de Sara.Nel tomada de Flickr


  • Violencia en las relaciones de pareja

    La violencia dentro de una relación, es sin dudas uno de los temas de pareja más controvertidos, por ser complicado de abordar.

    Vale la pena aclarar, que la violencia de la que hablamos, no sólo incluyen golpes, sino también malos tratos en el sentido psicológico o emocional.

    Así, la violencia en las relaciones de pareja, también puede ejercerse de manera verbal y puede ser tan destructiva y causar el deterioro en el vínculo, tanto o más que la violencia física.

    La violencia doméstica o violencia de género, es un problema muy serio que padecen miles de mujeres alrededor del mundo, y que se les hace muy difícil salir de este círculo, que ya se ha tornado vicioso.

    El miedo, la vergüenza, suelen ser los motivos por los cuales muchas personas callan o tapan estas situaciones de violencia en el hogar.

    Si hay hijos de por medio, es más difícil aún tomar la decisión de abandonar la relación, pero justamente se debe pensar primero en ellos. Es necesario saber que para los hijos, es más saludable una separación de los padres en lugar de tener que presenciar situaciones desagradables entre ellos.

    Generalmente la persona violenta, ha vivido esta misma situación de niños con sus padres, es por ello que repiten esa historia.

    El violento, hace uso del maltrato para imponer, dominar, incomodar, intimidar. Para el violento la comunicación no tiene demasiado valor, o le resulta muy difícil comunicarse de manera civilizada, es por ello que recurre a la violencia para expresar sus emociones.

    El maltrato emocional no es un aspecto menor. Tratar a la otra persona con insultos, palabras hirientes, humillantes, groseras, es una forma de violencia emocional.

    Pero no sólo las mujeres pueden padecer de violencia en su relación, aunque en menor proporción, los hombres también pueden recibir maltrato por parte de sus parejas. En el caso de los hombres, por una cuestión física más que nada, el maltrato que reciben más a menudo es el maltrato verbal, descalificador.

    En estas relaciones tóxicas, los disparadores que pueden provocar los actos de violencia por parte de uno de sus integrantes pueden ser celos, enojos, algo desde luego injustificado, nada justifica el violentarse o maltratar a la otra persona.

    La violencia en la pareja, es algo que puede detectarse ya en la época de noviazgo o en una convivencia previa. Es necesario estar atentos a los signos de violencia que se viven dentro de la pareja para poder buscar ayuda a tiempo, antes de que sea demasiado tarde, ya que en muchos casos corre peligro la vida.

    Aunque duela o parezca una decisión difícil de tomar, muchas veces la única salida posible es abandonar esa relación que sólo lleva a la autodestrucción, entre otras cosas.

    ¿Te ha tocado vivir violencia en tu relación de pareja?, ¿cómo lo has resuelto?

    Imagen de Lau Lau Chan tomada de Flickr


  • Cómo sobrellevar el duelo amoroso

    Todo duelo supone una pérdida y el duelo amoroso por la ruptura de pareja, puede llegar a ser tan desgarrador como la pérdida de un ser querido a causa de su muerte.

    Sobrellevar una ruptura amorosa o de pareja no es nada sencillo, pero el duelo es una etapa por la que necesariamente se debe atravesar para luego poder retomar el rumbo de nuestra vida.

    El proceso de duelo amoroso, según los especialistas, puede llegar a ser más o menos difícil de transitar dependiendo de la persona, su carácter, la personalidad de cada uno, pero también dependerá de la intensidad de los sentimientos y de las expectativas que se había volcado en esa relación.

    Cuando una relación de pareja se termina, es un momento crucial en la vida de las personas. Si la misma ha sido intensa y con proyectos en común que no se alcanzaron a concretar, los recuerdos no dejarán de perseguirnos y en esos momentos nos parecerá imposible poder salir adelante sin esa persona que se ha ido.

    Es ahí en donde comienza a gestarse la etapa del duelo, una etapa dolorosa pero necesaria de atravesar con la mayor valentía posible.

    Angustia, depresión, nostalgia, soledad, son algunas de las sensaciones que se suelen experimentar mientras se hace el duelo amoroso. Todos sentimientos que a nadie le gustaría tener que experimentar en carne propia pero que son absolutamente necesarios si queremos salir de la situación actual que estamos viviendo.

    Es positivo tratar de superar la etapa de una ruptura amorosa, saliendo con amigos o apoyándonos en ellos, pero no desde el lugar de la negación, ni con la intención de tapar ese vacío con una nueva y repentina relación.

    Elaborar el duelo amoroso y procesar la pérdida, es una buena manera de aceptar la realidad y poder encarar una futura relación de pareja con la seguridad necesaria para poder disfrutarla y no volver a repetir patrones.

    La pregunta que solemos hacernos es ¿cuánto durará la etapa del duelo amoroso?

    Como dijimos anteriormente, dependerá de cada persona, pero lo esperable es de seis meses a un año. Si pasado este tiempo no consigues superar la ruptura, entonces quizá lo mejor sea que consultes con un psicoterapeuta que te ayude a ver las cosas desde otra perspectiva para poder salir adelante.

    Suelen decir que nadie se ha muerto de amor, y con esta premisa debes encarar el duelo amoroso, quizá de esta manera y con una actitud optimista, te sea más fácil transitarlo.

    Imagen de uve tomada de Flickr


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