El final de una historia de amor puede ser tan importante como el comienzo. Sin embargo, el tono distinto de este momento hace que las personas puedan permanecer más tiempo del deseado en una historia en la que uno de los dos siente que se encuentra en un lugar cuando realmente desearía estar en otro. Tal vez, en su soledad. Quizá, con otra pareja.
Una ruptura es un acto de sinceridad con uno mismo y también con el otro. ¿Cómo tomar la decisión de romper? A veces, la ruptura se produce cuando uno de los dos se ha enamorado de otra persona. En otros casos, la duda constante causa tal desgaste que se produce el agotamiento definitivo en quien ya no quiere seguir alimentando la paciencia en esta historia.
1. Insatisfacción personal
Convivir con la sensación del vacío frecuente que describe la carencia de una realidad que se aleja del deseo interior, del proyecto de vida o del enamoramiento verdadero puede hacer que el protagonista termine cansándose de esperar a que algo cambie entre los dos. Este hartazgo resulta positivo porque describe el límite de quien toma conciencia de cuál es su decisión a partir de esta añoranza constante.