Acoso escolar: cómo afrontar sus efectos cuando eres adulto



Acoso escolar: cómo afrontar sus efectos cuando eres adulto

Cualquier tipo de acoso escolar en la infancia no es un juego de niños. De hecho, sus heridas emocionales pueden condicionar a la víctima en la vida adulta. Y es que, el impacto del acoso repetido y continuado deja una memoria pronunciada. Y causa un profundo dolor en la autoestima, en las relaciones personales y en la visión del futuro. Actualmente, existen diferentes asociaciones que luchan contra el bullying. Además, también existe una mayor conciencia en torno a un problema que, en la actualidad, también se desarrolla de forma online (como muestra el ciberbullying). Por otra parte, la lucha contra el acoso también da voz a los testigos que dejan de silenciar el comportamiento del agresor. El acoso escolar es tan complejo que, incluso cuando han pasado años de aquella etapa, el miedo puede brotar en otros momentos. Soledad y acoso escolar: cómo afrontar sus efectos cuando eres adulto.

¡Sigue leyendo para descubrir los efectos del acoso escolar en la madurez y diferentes herramientas para superar su impacto!

Acoso escolar: guía práctica para afrontar su impacto en la madurez

No todos los niños o adolescentes que han sufrido acoso escolar sienten la mismas secuelas en la vida adulta. Pero es esencial entender el alcance que el daño sufrido en la niñez puede dejar a largo plazo.

Qué efectos produce el acoso escolar en la madurez: 5 consecuencias

¿Cuáles son los efectos que se manifiestan con más frecuencia en esta situación? En el blog de mobifriends lo explicamos.

1. Miedo a vivir una realidad similar

Aunque el colegio quede en el pasado, la vida social de la persona sigue desarrollándose en otros escenarios: el trabajo, el barrio, el grupo de amigos… El acoso escolar puede convertirse en esa sombra que vuelve en forma de miedo a conocer gente nueva, a destacar y ser ridiculizado por el entorno, a ser uno mismo ante los otros… Es decir, el miedo que deja el acoso escolar en la vida adulta es ese factor que vuelve en algún instante. Especialmente, en momentos de cambio.

2. Rencor hacia quienes ejercieron el acoso escolar en la infancia o adolescencia

Sufrir una situación de acoso es una experiencia muy dolorosa. La víctima de acoso escolar en la infancia o la adolescencia puede sentirse muy vulnerable. Incluso cuando ha perdonado lo ocurrido y no vive permanentemente centrada en lo que pasó, puede sentir que el rencor sigue vivo en su interior.

3. Baja autoestima: cuando crees que no mereces recibir amistad o amor verdadero

El acoso escolar puede dejar la huella de una duda intensa. Una duda que se instala en la autoestima y la confianza personal. Quien ha sufrido la indiferencia, las burlas o la ridiculización por parte del entorno en alguna etapa, puede sufrir el efecto de una autoestima baja. En ocasiones, quien ha pasado por este proceso, y no ha recuperado la confianza en sí mismo, llega a creer que no es digno de recibir amistad o amor verdadero.

4. Qué efectos produce el acoso escolar en la madurez: pensamientos negativos

El acoso escolar también produce pensamientos negativos sobre el pasado, el presente o el mañana. La víctima puede revivir lo ocurrido en más de una ocasión mediante el recuerdo. Como hemos indicado, es habitual que perdure el miedo a volver a pasar por lo mismo en la juventud o en la vida adulta. Desde esa perspectiva, es frecuente que la persona anticipe una situación negativa ante una primera cita, al conocer gente nueva o en una situación inesperada.

5. Dependencia y carencias afectivas

Si la infancia es uno de los periodos más relevantes de la vida, el amor recibido o la indiferencia sufrida puede generar un gran impacto (de forma positiva o negativa según el caso). El acoso escolar suele dejar la huella de las carencias emocionales que acumula en su mundo interior quien no se ha sentido verdaderamente querido.

Por otra parte, es posible que surja una relación de dependencia con una figura de referencia como un familiar, la pareja o un mejor amigo. El acoso escolar vivido en la infancia o la adolescencia deja heridas que, en muchos casos, perduran en la madurez (aunque sea con menor intensidad).

Cómo afrontar los efectos del acoso escolar cuando eres adulto: 5 consejos clave

Cuando eres adulto tienes una mayor preparación y recursos prácticos para afrontar los efectos del acoso. ¿Qué puedes hacer para gestionar su alcance y cuidarte a nivel anímico? 5 consejos.

1. Sal de tu zona de confort y entrena tus habilidades sociales

Intenta exponerte a situaciones nuevas en las que puedes conocer gente interesante. Es aconsejable que, aunque sea de vez en cuando, salgas de tu zona de confort, hagas planes diferentes y participes en distintas actividades. ¿Qué ocurre cuando te integras en un nuevo entorno, con gente que no conoces y que no te conoce realmente? Las etiquetas, prejuicios y estereotipos se debilitan.

2. Escucha otros testimonios de adultos que han sufrido acoso escolar

La dimensión del acoso escolar y su huella a lo largo del tiempo son tan prolongadas que muchas personas han vivido situaciones complejas con los compañeros de colegio. Actualmente, existe una mayor concienciación, información y sensibilización en torno al acoso escolar. Muchas personas han alzado su voz en contra del acoso escolar. Y cada testimonio sincero aporta empatía, comprensión y esperanza por ser un ejemplo de superación.

3. Ayuda psicológica para afrontar los efectos del acoso escolar cuando eres adulto

Tal vez ya recibiste algún tipo de apoyo especializado anteriormente. Sin embargo, cada víctima de acoso tiene su propio proceso interior. Quizá necesites que alguien te escuche. A lo mejor necesitas comprender lo que te está pasando. Tal vez hay un sufrimiento que interfiere en tu presente. La ayuda psicológica es esencial para superar los efectos del acoso en la etapa adulta.

4. Aprende a ser protagonista a pesar de haber sido víctima de acoso escolar

El acoso escolar vivido en la infancia puede hacer que el afectado se sienta atrapado en el rol de víctima. Pero, a través del apoyo familiar, la compañía de los amigos, la ayuda psicológica y el desarrollo personal, es preciso empezar a ser protagonista.

5. Di adiós a las compañías negativas en la etapa adulta

Elige de forma consciente a tus amigos más cercanos. No deposites tu confianza profunda en cualquier persona. Di adiós a las compañías negativas, aquellas que suponen una influencia destructiva. La compañías negativas pueden tapar de forma superficial y aparente el miedo a la soledad (pero hacen que en los momentos importantes te sientas más solo todavía).

¿Viviste un periodo de acoso escolar durante tu infancia y ese sufrimiento todavía persiste en la etapa adulta? ¿Quieres compartir tus sentimientos? ¡Comenta tu historia y tu mensaje en el blog de mobifriends! ¿Quieres ayudar a otras personas con la información práctica que contiene el artículo? ¡Compártelo con tus contactos!

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